Fuego balcánico en la Catedral: Djokovic ganó su 5º Wimbledon y su 16º Grand Slam

En la final más larga en Wimbledon, el serbio ganó el partido en un tie-break en el 5º por 13/12. El suizo tuvo 2 matchs points y no lo pudo cerrar.

LONDRES / Como empezar a tratar de explicar lo inexplicable, es que estos 2 fuera de serie jugaron un gran partido, definido en el 5º set en una muerte súbita  por 13/12 (7-3). Y como en toda gran batalla hay un vencedor, fue el turno del serbio y nº1 del mundo Novak Djokovic ante “Su Majestad” Sir Roger con 37 años. Con parciales de 7/6 (5) 1/6, 7/6 (4),  4/6 13/12 (3) el serbio llegó a su 5º Wimbledon y su 16º Grand Slam. Sin dudas fue una final no apta para cardiacos, al punto que Nole salvó 2 match points antes de quedarse con el match y por ende el título.

Con esta victoria Nole se encamina a la lucha por ser el más laureado de la historia.  Y como si el pasto de la “Catedral estuviera de su lado consiguió su 3º final ante Roger aquí como lo hiciera en el 2014 y 2015. En este contexto Nole se aferró a su instinto de sobrevivencia ya que en el 3º set salvó una pelota de set, y en el 5º como decíamos salvo 2 de partido antes de acariciar la soñada copa. En el 1º set paridad hasta que en la muerte súbita el serbio se adelanta y pone la diferencia. Para el 2º es la vez de Roger mandar, con su derecha que lastimo como un misil. En el 3º lo dicho, paridad con el alerta de salvar una pelota de set antes de arribar a una nueva muerte súbita, en donde Novak vuelve a pegar 1º. Para el 4º set, otra vez e Roger que con su experiencia a cuestas iguala al cansancio para estirar la definición a un 5º. Hasta ese momento Roger con su derecha había neutralizado el revés a dos manos de Nole (arma mortal) al colocar su derecha en paralelo. Pero claro, Nole tenía otras armas, y con el cansancio lógico y la presión en aumento el suizo fue perdiendo precisión.

En el set decisivo Nole se pone 4-2 pero Roger lo empató a 4-4, Y en una lucha al todo o nada el serbio varias veces terminó en la hierba, tras resbalones o palomitas para llegar a pelotas imposibles. Y la emoción con la adrenalina a full. Hasta ese 12-12 con una nueva muerte súbita, estrenada en este nuevo formato. Y allí el serbio se despegó, para poner el 7-3.  La última pelota de Roger por el aire desató la euforia y alegría contenida. Uno tocaba el cielo con las manos…era Novak el otro como había estado a pasos del paraíso y miraba resignado y emocionado…Roger, el público en euforia y agradecido por tan inolvidable final .Este domingo “el fuego balcánico” volvió a decir presente.