Allie Kiick, actual número 259 del ranking mundial WTA, fue diagnosticada de cáncer de piel a sus 20 años de edad.
A la estadounidense le encontraron un melanoma que, por el momento, la obliga a dejar el tenis.
Kiick comunicó la noticia a través de su cuenta personal de Twitter e incluso se atrevió a subir una foto donde se ven las consecuencias de la enfermedad.