CINCINNATI / El Masters 1000 de Cincinnati, aguarda a Mardy Fish para verlo por ultima vez dentro de una cancha de tenis. Esas que el tanto recorrió y donde dejo sus huellas imborrables. De alguna manera sus pasos caminan hacia una meta que en vez de trofeos y lauros lo espera para rendirle su último homenaje, que ojala fuera con titulo y corona. Ese mismo lugar donde lo vio recibir la bandeja de plata en el 2003 ante su amigo Andy Roddick y luego en el 2010 nada menos que antes Federer. Momentos únicos de esos que las retinas y la memoria guardaran para siempre, Y mas allá que aquí en Manson será su penúltima parada rumbo a su destino, dejando atrás los torneos de Atlanta e Indian Wells, donde tuvo rápidas despedidas en los debuts, aquí ante Troicki tendrá una nueva opción de disfrutar de en sus últimos destinos de una de sus superficies preferidas.
Fish ha manifestado: “No es ningún secreto que ha sido uno de mis 3 torneos preferidos, junto al US Open, Indian Wells y aquí en Cincinnati. Es sin duda un lugar donde me siento muy cómodo me divierto, el publico siempre me ha apoyado, además he tenido éxitos aquí por lo que desde ya descarto que será una semana inolvidable. Cada vez que vuelvo lo disfruto a pleno.” Por otro lado “He sentido sensaciones ambivalentes, extrañas si se quiere, por momentos pensé que podía lograrlo y a la vez que no podía lograr, por ese jugué al golf un tiempo, me sentía agradecido que hubiera un deporte con el que pudiera competir, y a la vez entretenerme. Mientras estuviera concentrado en el golf el tenis no estaría dando vueltas en mi cabeza, estuve meses (10) sin agarrar una raqueta, me sentía feliz, por más que en el fondo no deseaba que mi relación con el tenis terminara así. Es como si terminaras con tu novia o el amor de tu vida, aunque estar con ella fuera imposible…. Pero buscaba de alguna forma la mejor manera de decir adiós sin lastimarme”.
Y cuando mas oscuro aparece el túnel, una luz de esperanza, siempre asoma al final del mismo. Por eso Mardy Fish vislumbra su futuro con algo más de optimismo. “Obviamente que ha sido muy difícil para mi, volver a sentirme 100%, debido a que todas las emociones del pasado han desaparecido, el trastorno de la ansiedad y muchas cosas así. Ha sido un desafío muy grande el de volver a pisar una cancha, aunque con la ayuda y compañía de Andy (por Roddick), me divertido mucho y pasado maravillosamente bien.” Esto debido a que llegaron a 4° de final en Atlanta en dobles.
“Si miro hacia atrás me emociono, puedo ver con mis ojos que he tenido una gran carrera, algo que me deja muy contento de cómo me han ido las cosas. Tengo un montón de recuerdos de este deporte, que me han dejado innumerosa recuerdos de momentos y hechos que marcaron mi vida. Soy muy afortunado comenta el de Minnesota, aun sabiendo que la próxima vez que pise la pista central de Ohio, podría ser la ultima”. Y si la hora del adiós definitivo ya inicio su camino inexorable, los pasos son seguros, aunque en su interior sepa que no será como antes que siempre tenis una revancha, esta vez no, aunque pase lo que pase, jamás se olvidara de estos momentos, ellos vivirán para siempre en las retinas y en los archivos del corazón Salud Fish.