NUEVA YORK / ¡Que final! Imposible de olvidar por todo lo que brindaron, lucharon y regalaron. ¿Qué adjetivos inventar para explicar lo de Nadal? Quizás lo mejor sea contar la historia de esta final. Con 2 jugadores que buscaban objetivos diferentes en la victoria. Rafa en seguir ampliando su leyenda, Medvedev en ser el 1º ruso en ganar aquí después de 15 años y a los 23 años de edad y jugando su 1ª final aquí. En este contexto Nadal terminó quedándose con la victoria luego de una batalla de 4hs 50 minutos en 5 interminables sets, con parciales de 7/5,6/3,5/7, 4/6, 7/5. Es su 19ª corona de Grand Slam y la 4ª aquí. A los 33 años el español logró su titulo nº 84 y el 4º del año (Masters 1000 de Roma, Roland Garros Masters 1000 de Canadá y hoy US Open. Volviendo al partido, eran 2 opuestos desde la edad 23 contra 33, pasando por el juego. Y si Rafa ha hecho de su temperamento y entrega, aliado a su cabeza, estado físico y tenis, el ruso no se queda atrás.
En el 1º set Medvedev dejaba claro que era un muro donde rebotaban una y otra vez los tiros de Nadal, que tenía enfrente a un rival con mucho de lo suyo. Al final el 7/5 llegó porque Rafa siempre encuentra una pelota más. En el 2º volvió a sacar ventaja y lo cerró 6/3.En el 3º parecía que la historia ya estaba escrita, el español quiebra y daba un paso enorme, entonces aparece el Medvedev que asombro esta temporada, con su lucha y tenis con amplio repertorio lo da vuelta y fuerza un 4º, allí el ruso asombra, y los 2 dejando el alma en la cancha .Al final el ruso se queda con el set y se fueron al 5ª. Y si había más dramatismo para esta final, es que Rafa luego de un inicio parejo, logra quebrar, y ponerse 5-2 sacando para el partido, pero otra vez el ruso saca fuerzas de quién sabe dónde y no se resigna y empata en 5-5. ¿Que más se podía pedir?
Y como decíamos luego de empatar en 5-5, Rafa pudo mantener el suyo para el 6/5 y a seguir logra quebrar para el 7/5 y el campeonato. Tanto fue el sufrimiento que cuando el tiro del ruso se va largo el balear se deja caer al piso, para dar rienda suelta a los nervios, luego el saludo con su rival y las lágrimas que calman la ansiedad y los nervios acumulados. El público de pie aplaudiendo a 2 gladiadores. Uno que sigue escribiendo capítulos a su leyenda, el otro que demostró que llegó para quedarse al selecto grupo de los Top Ten.
Este domingo Nueva York tiene los colores españoles y de alguna manera los rusos por una final para el recuerdo. Para la “Fiera” ya no hay jungla que lo detenga, del polvo de ladrillo a esta de cemento, no existe jaula para encerrarlo.
