TORONTO / Otra vez esa enfermedad dice presente. Petra Kvitova halló finalmente la respuesta a su fatiga en distintos tramos de la temporada: mononucleosis. A la checa le diagnosticaron hace poco más de una semana, pero aun así recibió el alta médica para disputar el WTA Premier de Toronto.
A principios de año, Kvitova dejó pasar Indian Wells y Miami por cansancio acumulado. Regresó en la gira de polvo con victoria sobre Serena Williams (la única que pudo con la N°1 en 2015) y título en Madrid. Pero desde allí volvieron los inconvenientes, con rápidas despedidas en Roma, Roland Garros y Wimbledon.
«En Eastbourne (en la gira de pasto) me tuve que bajar porque tenía dolor de garganta y los antibióticos no me hacían efecto. Ahí nos dimos cuenta que mi sistema inmune estaba bajo, fuimos haciendo nuevas pruebas y apareció el problema», explicó la N°4 del mundo este lunes.
«Es duro mirar atrás, pero esto me aclara muchas de las cosas que pasaron estos meses. Sirve entender ahora por qué estaba tan cansada», agregó. Y enfatizó: «Todavía no estoy al 100% recuperada, pero sí en condiciones de jugar».
La situación de Kvitova se suma, dentro de la WTA, a los casos recientes de Christina McHale y Heather Watson. También Roger Federer padeció la enfermedad años atrás. Aunque tal vez el caso más célebre sea el del sueco Robin Soderling quien nunca pudo reponerse y debió dejar el tenis en pleno auge.
Ojala que la rubia de Europa Central pueda superar este mal que en los últimos años ha sido el azote de los y las tenistas.