WASHINGTON / Muy buen apronte en el cemento pensando en lo que viene. El japonés Kei Nishikori arrancó bien una de las giras más importantes para su planificación. El último finalista del US Open se consagró en el ATP 500 de Washington y llega afilado a los Masters 1000 de esta etapa del año, y claro pensando en el US Open.
Este domingo el nipón (5º del ranking mundial) supero a John Isner (18º ATP) por 4/6, 6/4 y 6/4 para quedarse con su 3º título en el año, tras Memphis (bajo techo) y Barcelona (arcilla).
El primer set fue bien parejo, con el japonés teniendo chances de equilibrar los games con el servicio de Isner, aunque fue este último quien capitalizó la chance para llevarse el parcial.
Ya en el segundo, Nishikori logró leer mejor el saque de su rival y quebró de entrada, ventaja que nunca perdió hasta forzar al set definitivo.
En el 3º se repitió la situación pero en el tercer game: quiebre del 2º preclasificado del torneo y pase al frente por 2-1, camino a un nuevo título, el 10º a nivel ATP en su carrera.
De esta manera, repitió la historia del sábado donde remontó la situación y el trámite del partido para vencer por 3/6, 6/1 y 6/4 al croata Marín Cilic, justamente rememorando la definición del último US Open.
Por su parte John Isner (18°) llegaba con el empujón que le deparó el título en Atlanta (su tercero consecutivo en aquel torneo) y accedió a la final luego de salvar tres match points ante Steve Johnson (55°) en la jornada del sábado.
En la capital del coloso del norte, un japonés canto pleno, justamente cuando se recuerda el triste aniversario de las explosiones atómicas en Hiroshima y Nagasaki, aquí la bomba fue nipona.