Y pasó lo que estaba dentro de lo posible, enfrentarse a un jugador con menos ranking pero que venía de ganar 3 partidos en la Clasificación, cuando eso significa confianza y la ventaja de saber cómo se está sintiendo en el torneo, y así fue que el alemán Matthias Bachinger (ATP 142) eliminó a Pablo Cuevas en la 1a ronda del »Australian Open» en Melbourne por 7-6(1), 6-3 y 6-1 en 1 hora y 40 minutos de partido.
Una pena que Pablo no pudiera encontrar su tenis en todo el partido, porque desde el inicio se lo veía sin sentir sus golpes y luchó para mantenerse en el 1er set, incluso recuperando un quiebre de saque para llegar al »tie break» dónde Bachinger se sentía más firme, con mucha potencia en el golpe de derecha y sacando con confianza, todo lo contrario que ocurría del lado de Cuevas, y los puntos se fueron muy rápido para que el alemán se quedara con el »tie break» con un claro 7-1.
De arranque en el 2o set un nuevo quiebre de saque para Bachinger le dio más confianza y cada vez se lo veía más sólido mientras Pablo luchaba por mantenerse en el partido pero sin sentir los golpes, sin poder manejar un plan de juego, y así es muy difícil poder encontrar la calma necesaria, y si faltaba algo más para perder más confianza, sacando 3-5 y 40-0 para colocarse 4-5, se le fueron 5 puntos consecutivos y ahí el 2o set para su rival por 6-3.
En el 3er set hubo un intento de reacción y Cuevas se colocó 15-40 con el saque de su rival, como para quebrar de entrada y salir a buscar un cambio en el partido, pero lejos de ocurrir eso, Bachinger se recuperó con muy buenos saques y con una dosis extra de confianza y ya a esa altura del partido parecía que no podía errar un solo tiro. Mantuvo el saque y quebró el saque de Pablo para tomar una rápida ventaja en el set y ya parecía sentenciado el partido, porque mientras el alemás seguía creciendo, Cuevas sentía una enorme frustración de que nada salía bien, y quebrando una vez más en el set Bachinger se quedaba con el partido con un claro 6-1.
Queda el dobles junto al español David Marrero todavía, pero la gran ilusión de avanzar en el Abierto de Australia siendo el cabeza de serie No 27 quedó frustrada, y duele más porque todos sabemos, y Pablo mejor que nadie que hubiera encontrado tranquilidad y confianza, hay tenis de sobra para seguir cosechando triunfos.